Lucir una piel sana, bonita y luminosa ha sido durante años signo ineludible de belleza y de salud, por lo que encontrar la fórmula para que la dermis tenga una calidad excepcional, ha sido una de las obsesiones beauty desde tiempos remotos. El mercado de la cosmética constantemente está sacando productos, a cual más sofisticado, que prometen hacer las mil maravillas y dejarnos una piel digna de photoshop. Sin embargo, a menudo, nos olvidamos de lo más sencillo y básico pero a la vez tan importante, como es una buena limpieza e hidratación. Sin estas dos cosas da igual todos los tratamientos que usemos, ya que no hará el efecto deseado y nuestra piel seguirá sin tener un aspecto realmente sano. Las coreanas lo saben bien y ponen mucho énfasis en hacer bien estos dos pasos a diario (en realidad son unos cuantos más) y sin excepción, y aquí, en occidente cada vez estamos tomando más conciencia de lo importante de limpiar e hidratar bien nuestra piel. El espino amarillo es uno de los ingredientes esenciales para que nuestra piel luzca de la mejor manera, a continuación te lo contamos.
Sobre la importancia de consumir ácidos grasos
Seguramente habréis oído hablar, en más de una ocasión, sobre la importancia de introducir en nuestra dieta ácidos grasos omega 3 y 6. Tiene múltiples beneficios para nuestra salud, especialmente, la cerebral.
Aunque la palabra ‘’graso’’ relacionada con la comida pueda parecer algo negativo, lo cierto es que necesitamos de alimentos que contengan ácidos grasos para mantener un estado de salud óptimo. La diferencia radica en el tipo y la calidad de las grasas que consumamos. El problema es que nuestro organismo no es capaz de producir algunas de las grasas necesarias, como es el caso de los ácidos grasos, por lo que su obtención depende únicamente de nuestra dieta.
Ácidos grasos y piel
Los ácidos grasos esenciales mantienen nuestra piel hidratada y protegida. Uno de los que contiene más propiedades y beneficios para nuestra dermis es el omega 7. Está comprobado que aumenta la protección y la integridad celular. O lo que es lo mismo, ayuda a regenerar, hidratar y proteger nuestra piel, actuando desde el interior hacia el exterior.
También ejerce un efecto antioxidante y estabilizador de las membranas celulares de la piel y las mucosas. Está presente en gran medida en las diferentes capas de la piel y las mucosas de nuestro organismo. De entre sus muchas funciones destacan su actividad inflamatoria, antioxidante y nutritiva.
Alimentos dónde encontrarlo
Hay alimentos muy ricos en ácido omega 7, como por ejemplo, el aceite de espino amarillo. Cuenta con numerosos estudios que prueban que disminuye y mejora las afecciones de la piel y las mucosas, además de mantenerlas en buen estado.
Otra de las fuentes más potentes de este ácido graso son los frutos del mar, las nueces de macadamia, el queso cheddar, los huevos y en pescados grasos como el salmón, el atún, las sardinas y la caballa, entre muchos otros.
Así que ya sabéis, si queremos lucir una piel radiante, ya podemos ir hoy mismo al mercado a conseguir alimentos ricos en ácidos grasos.
